A LA PRIMERA PERSONA
A la primera persona, que me ayude a comprender
pienso entregarle mi tiempo pienso entregarle mi fe,
yo no pido que las cosas me, salgan siempre bien,
pero es que ya estoy harto de perderte sin querer (querer).
A la primera persona que me ayude a salir
de este infierno en el que yo mismo decidí vivir,
le regalo cualquier tarde pa' los dos,
lo que digo es que ahora mismo ya no tengo ni siquiera dónde estar.
El oro pa' quien lo quiera pero si hablamos de ayer:
es tanto lo que he bebido, y sigo teniendo sed,
al menos tú lo sabías, al menos no te decía
que las cosas no eran, como parecían.
Pero es que a la primera persona que me ayude a sentir otra vez,
pienso entregarle mi vida, pienso entregarle mi fe,
aunque si no eres la persona que soñaba para qué, q voy a hacer? nada.
¿Qué voy a hacer, de los sueños?
¿qué voy a hacer, con aquellos besos?
¿qué puedo hacer, con todo aquello, que soñamos?dime dónde lo metemos.
¿Dónde guardo la mirada que me diste alguna vez?
¿dónde guardo las promesas dónde guardo el ayer?
¿dónde guardo niña tu manera, de tocarme?¿dónde guardo mi fe?
Aunque lo diga la gente yo no lo quiero escuchar,
no hay más miedo que el que se siente cuando ya no sientes nada,
niña, tú lo ves tan fácil, ¡ay amor!
pero es que cuanto más sencillo tú lo ves, más difícil se me hace.
A la primera persona que me ayude a caminar
pienso entregarle mi tiempo pienso entregarle hasta el mar,
yo no digo que sea fácil pero niña,
ahora mismo ya no tengo ni siquiera dónde estar.
.A la primera persona que no me quiera juzgar
pienso entregarle caricias que yo tenía guardadas,
yo no pido que las cosas me, salgan siempre bien
pero es que ya estoy harto de perderte.
Y a la primera persona, que me lleve a la verdad
pienso entregarle mi tiempo no quiero esperar más,
yo no te entiendo cuando me hablas ¡qué mala suerte!
y tú dices que la vida tiene cosas así de fuertes.
Yo te puedo contar cómo és una llama por dentro,
yo puedo, decirte cuánto es que pesa su fuego,
y es que amar en soledad, es como un pozo sin fondo
donde no existe ni Dios, donde no existen verdades
Es todo tan relativo, como que estamos aquí,
no sabemos, pero amor, dame sangre pa' vivir,
al menos tú lo sabías, al menos no te decía
que las cosas no eran como parecían.
Y es que a la primera persona que no me quiera juzgar
pienso entregarle caricias que yo tenía guardadas,
niña tú lo ves tan fácil ¡ay amor!
pero es que cuanto más sencillo tú lo ves, más difícil se me hace.
A la primera persona que no me quiera juzgar
pienso entregarle caricias que yo tenía guardadas,
yo no digo que sea fácil, pero niña,
ahora mismo ya no tengo ni siquiera dónde estar.
ni siquiera dónde estar.
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